Hola!!!
Hace varios días que no comparto con ustedes...la razón es que por estos días ando bastante ocupada, con muchas tareas entre manos...pero, siempre pensando en editar cosas en el blog, por lo que material tengo...
lo que me hace falta es ...¡tiempo! ...qué novedad! y a quien no, verdad?
Bueno, les cuento que después de varios días de temperaturas agradables y primaverales, ayer tuvimos un día gris, algo fresco que con el paso de las horas terminó trayendo un espeso banco de niebla...
En un momento que me tomé una pausa, salí a caminar un rato y me dirigía hacia el mar...como siempre!
La paleta de colores que me ofreció fué realmente maravillosa...es increíble como, los mismos elementos, que bajo un sol radiante tienen colores vivos y contrastantes, bajo un tipo de luz, como la de ayer, parece que se combinan y emparejan sus tonalidades, quedando todos dentro de una gama de colores de la misma familia...
Observen...
El color del agua del mar era similar al de esos trocitos de vidrio desgastado que se encuentran mezclados con el canto rodado, esos que en inglés se les llama "sea glass"...algo así como "vidrio o cristal de mar"...
Aquí hay una foto de trozos de "sea glass", en este caso en un tono parecido al que tenía el mar...
Verdad que parece "sea glass"?
Realmente los colores están hermosos...no dejo de maravillarme, porque frente al mar ningún día es igual a otro, todos los días nos sorprende.
Uno va hacia él sabiendo que nunca va a salir defraudado, porque el mar, ese gigante al que se le debe respeto debido a su gran poder, misterio e inmensidad, también es muy generoso con nosotros, y entre lo mucho que nos ofrece, nos da regalos como estos...
Bye,
Eme
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